La Junta de Castilla y León ha hecho un llamamiento a la ciudadanía para que colabore activamente en la identificación de los responsables de los incendios provocados que se han registrado en lo que va de año en la provincia de Ávila.
Según los datos obtenidos por los técnicos y agentes medioambientales durante las investigaciones sobre el origen de los fuegos, hay una clara presencia de intencionalidad en muchos de ellos. De los 41 incendios forestales registrados desde enero de 2025, 19 han sido provocados de forma deliberada, lo que representa un 46,34 % del total. Otros 6 se deben a negligencias.
Desde el Gobierno autonómico destacan que los fuegos intencionados suelen ser los más destructivos, ya que quienes los provocan escogen los lugares más vulnerables y las condiciones más favorables para causar el mayor daño posible. Es el caso del incendio de Cuevas del Valle-Mombeltrán, que continúa activo.
La Junta solicita a la población dos acciones concretas: por un lado, aportar cualquier información útil que permita identificar a los culpables, y por otro, evitar conductas imprudentes que puedan originar nuevos fuegos.
Recuerdan además que provocar un incendio forestal de forma voluntaria puede acarrear penas de hasta 20 años de prisión, así como la obligación de indemnizar por los daños causados y los costes derivados de la extinción.
La investigación que dirige la Junta tiene un doble objetivo: prevenir futuros incendios mediante la adopción de nuevas medidas, y esclarecer responsabilidades, tanto penales como administrativas, en colaboración con los juzgados y, cuando hay indicios claros de delito, con la Guardia Civil.
Desde la Consejería también se ha trasladado su agradecimiento a la Delegación del Gobierno en Castilla y León por el trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y han solicitado un refuerzo en las labores de vigilancia e investigación para erradicar estas acciones que no solo amenazan el patrimonio natural, sino también la vida de las personas.