La Federación de Asociaciones de Vecinos de Ávila (FAVA) ha expresado su "profunda preocupación" ante el incremento de la presión fiscal que, aseguran, han soportado los abulenses en el último año. La organización vecinal pide al Ayuntamiento "altura de miras" para afrontar la complicada situación económica que atraviesan muchas familias.

Según FAVA, al impacto de la subida de impuestos se suma un contexto de encarecimiento de alimentos, alquileres en máximos históricos y el aumento previsto en los recibos de electricidad y gas de cara al invierno. Una combinación que, advierten, está empujando a numerosas familias a solicitar ayudas básicas para poder subsistir.

La federación recuerda que estos problemas son "de sobra conocidos" por el Ayuntamiento de Ávila, al que critican por no aplicar medidas de alivio y, en cambio, prever un aumento del 11% en la presión fiscal en 2025.

Como ejemplo del deterioro económico, señalan el mercado del automóvil: los vecinos no pueden acceder a vehículos eléctricos puros, recurriendo en su mayoría a modelos híbridos para cumplir las exigencias medioambientales locales. Sin embargo, denuncian que este esfuerzo "no se ve recompensado en los impuestos", ya que las bonificaciones municipales siguen favoreciendo únicamente a los coches eléctricos, más costosos e inaccesibles.

Ante este panorama, FAVA ha remitido a los diferentes grupos municipales una propuesta de reducción de impuestos de cara a la elaboración de las ordenanzas del próximo año. Entre las medidas planteadas figuran la rebaja del IBI, la reducción de las tasas de basuras y agua, la eliminación de la tarifa de telelectura de contadores, así como la equiparación de las bonificaciones fiscales para vehículos híbridos y eléctricos, sin limitaciones por antigüedad.