La Diputación de Ávila reafirma su compromiso con la transición energética en la provincia, impulsando activamente la creación y el desarrollo de comunidades energéticas locales. En un esfuerzo por apoyar a los municipios, se han celebrado encuentros informativos en Muñosancho y Cisla, dirigidos a alcaldes de la comarca de La Moraña, con el objetivo de constituir la primera Comunidad Energética Comarcal de Ávila.

El diputado de Asuntos Europeos, Energía y Turismo, Armando García Cuenca, ha señalado que esta iniciativa es "una clara muestra de apoyo a los municipios para que pongan en marcha proyectos que promuevan la transición energética".

Técnicos de la Agencia Provincial de la Energía y responsables de la Oficina de Transformación Comunitaria (OTC) y del Proyecto Europeo LIFE Beckon, se desplazaron a estas localidades abulenses para explicar en detalle a los alcaldes el concepto y los beneficios de las comunidades energéticas. Estas entidades jurídicas, de participación voluntaria y abierta, permiten a ciudadanos, pymes y autoridades locales ejercer un control efectivo sobre la producción y consumo de energía.

El objetivo principal de estas comunidades es ofrecer beneficios energéticos a la comunidad, generando a su vez importantes ventajas medioambientales, económicas y sociales para los miembros y la localidad en general. Se trata de organizaciones donde los participantes se involucran directamente en la planificación e implementación de medidas para la implantación de energías renovables en la producción, consumo y comercialización de energía eléctrica, térmica, mecánica o combustible (biogás), así como en el desarrollo de medidas de eficiencia energética o de movilidad sostenible.

Recursos locales

Además, las comunidades energéticas aprovechan los recursos locales disponibles, como la energía eólica, solar o la biomasa, fomentando la autonomía energética y reduciendo la dependencia de fuentes externas.

La Diputación de Ávila considera que la creación de esta Comunidad Energética Comarcal representa un paso fundamental para avanzar hacia un modelo energético más sostenible y participativo en la provincia abulense, generando beneficios para el medio ambiente y la economía local.