La Diputación de Ávila ha formalizado la continuidad de su alianza con Faema Salud Mental mediante la renovación de un convenio valorado en 6.000 euros, destinado a seguir desarrollando programas de apoyo psicológico y educación emocional dirigidos a menores y jóvenes de 10 a 21 años. Según recuerda la vicepresidenta segunda y diputada de Familia, Dependencia y Oportunidades, Beatriz Díaz, se trata de "un proyecto esencial que aborda la salud mental de niños, adolescentes y jóvenes de 10 a 21 años desde una perspectiva positiva, ofreciendo apoyo psicológico especializado e implementando dinámicas de sensibilización en centros educativos y entornos comunitarios".

El acuerdo cobra especial relevancia ante la creciente incidencia de problemas de salud mental en edades tempranas, un fenómeno que refrenda la OMS, organismo que alerta de que la mitad de estos trastornos debutan antes de los 14 años. En palabras de Díaz, "con este tipo de programas y nuestra alianza con Faema consolidamos un recurso esencial para la prevención y promoción del bienestar emocional para los jóvenes de la provincia".

La vicepresidenta incide en el valor estratégico de esta intervención, señalando que "invertir en la salud mental de nuestros niños y jóvenes es una excelente inversión de futuro para nuestra provincia; y este proyecto, que impulsamos con Faema pone el valor de la prevención activa y el acompañamiento psicológico para la población infantojuvenil. Nuestro objetivo es claro: dotar a cada niño y cada joven de Ávila de las herramientas emocionales necesarias para afrontar los desafíos de la vida, para manejar el estrés y la ansiedad, para dialogar sobre sus miedos y, en definitiva, para que puedan ser felices. Es una responsabilidad compartida, y la Diputación reitera su apoyo incondicional a esta labor tan importante".

Por parte de Faema, su directora general, Inma Pose, subraya el peso que tiene este apoyo institucional en la continuidad del proyecto. "Este convenio es el corazón de nuestra intervención. Nos permite llevar una ayuda esencial y especializada no solo a los menores, sino también a sus familias y un apoyo a los profesionales del ámbito educativo. La salud mental no es una tarea individual; es un ecosistema." continúa, resaltando su trabajo en ámbitos como la prevención del suicidio, la detección de autolesiones, el bullying o diversas conductas de riesgo. Pose enfatiza además su agradecimiento, "agradecemos profundamente el apoyo de la Diputación Provincial de Ávila, que nos permite continuar esta labor vital y coordinarnos de manera eficaz con servicios sanitarios, educativos y sociales".

Resultados del proyecto

El programa conjunto Diputación–Faema ha permitido consolidar una red integral de prevención y atención emocional, cuyos principales avances son notables y abarcan distintos ámbitos de intervención.

En cuanto a la intervención temprana, se han alcanzado los objetivos de detección precoz, acompañamiento emocional y sensibilización comunitaria.

La atención psicológica especializada también ha experimentado un notable impulso: 85 adolescentes y jóvenes han recibido apoyo profesional, además de 87 familias o cuidadores.

Respecto a la prevención de conductas de riesgo, el proyecto actúa de forma directa sobre problemáticas como la ansiedad, el estrés, la ideación suicida, los trastornos de la conducta alimentaria, el consumo de sustancias, las conductas violentas y el acoso en el ámbito escolar.

La Escuela de Familia Infantojuvenil, de carácter mensual, se ha consolidado como un espacio de formación y apoyo emocional para padres, madres y cuidadores, convirtiéndose en un recurso estable y muy valorado.

En el ámbito rural, la campaña ‘Salud Mental en Positivo’ ha logrado ampliar su presencia llegando a 11 localidades y a un total de 201 participantes. Además, ha incorporado dinámicas innovadoras como un escape room interactivo que facilita la adquisición de habilidades emocionales de forma lúdica.

Finalmente, la coordinación interinstitucional se mantiene como un pilar del proyecto, con una colaboración constante entre los servicios de salud mental infantojuvenil, atención primaria, servicios sociales, centros educativos y la Dirección Provincial de Educación, mejorando la derivación y garantizando una atención más completa.

En esta línea, Díaz reafirma que "el bienestar emocional de nuestros jóvenes no puede esperar, es fundamental continuar desarrollando estrategias que favorezcan entornos seguros, reduzcan el estigma y refuercen las habilidades emocionales de la infancia y adolescencia, de ahí el claro compromiso de la Diputación".

Finalmente, Pose remarca su agradecimiento por el respaldo recibido, "ampliar y diversificar las acciones, y animamos a seguir dialogando y trabajando juntos para construir una sociedad donde cada niño y joven se sienta apoyado y valorado. La salud mental es un derecho y una prioridad que nos une a todos".