La ministra de Defensa, Margarita Robles, resaltó este domingo el valor de la bandera de España como la "mejor manifestación" de la unión entre los ciudadanos, que trabajan por "el bien común, la seguridad y la paz en el mundo", según informa EFE.

El mensaje lo pronunció durante la inauguración de la nueva plaza de España en Sanchidrián, localidad situada a unos 35 kilómetros de la capital abulense. A pesar de la mañana lluviosa, numerosos vecinos acudieron al acto, que incluyó un homenaje a la bandera y a los caídos a cargo del Regimiento Asturias 31, de la Brigada Guadarrama XII.

La ministra estuvo acompañada por el alcalde y diputado nacional socialista, Manuel Arribas. Ambos destacaron el cambio de denominación de la antigua plaza Mayor, que desde ahora lleva el nombre de plaza de España, con la enseña nacional ondeando en el centro del municipio. Robles reconoció sentirse "como en casa" en Sanchidrián, al que acude "muchas veces", y afirmó que este domingo fue "un día muy especial" tanto por la inauguración como por el homenaje militar.

En su intervención, Robles hizo especial hincapié en la importancia de que la plaza lleve el nombre de España, con la bandera como símbolo central. También elogió la presencia del Regimiento Asturias 31, al que calificó de "heroico", y recordó que sus integrantes han estado "en todas las partes y en todos los momentos, en España y fuera de España, defendiendo la paz y la libertad de todos los ciudadanos".

"Esta bandera que nos une y este gran país que es España", añadió, "es la mejor representación de que estamos todos unidos y trabajando por el bien común, por la seguridad y, en este caso, por la paz en el mundo".

La ministra concluyó subrayando que la participación de la Brigada Guadarrama evidencia "los grandes vínculos que hay entre nuestro ejército y España". Y cerró su discurso con una declaración personal: "Para mí es un honor, como ciudadana y como española, esta bandera, el nombre de esta plaza y poder estar en Sanchidrián".

Entre los aplausos de los asistentes, tomó después la palabra el alcalde, Manuel Arribas, mientras desde el público se escucharon algunos gritos de "Palestina libre" según recoge EFE.