El incendio forestal que afecta a la comarca del Valle del Tiétar continúa activo y sin estabilizar, con un perímetro de unos 25 kilómetros y una superficie afectada estimada entre 1.500 y 2.000 hectáreas, según ha explicado el jefe del servicio de incendios forestales de la Junta, Ángel Sánchez.

El técnico ha confirmado que "seguimos trabajando, sobre todo en los perímetros del Arenal y de Mombeltrán porque la prioridad siempre es la población". La labor se centra en fijar el perímetro y eliminar combustible dentro de él, mediante contrafuegos y maquinaria pesada, ante los cambios de dirección del viento previstos para esta tarde y noche.

La situación sigue siendo crítica. "Está confinado, sigue el Arenal y ahora está confinado Mombeltrán", ha señalado Sánchez, tras formarse una nueva lengua de fuego en esta localidad como consecuencia de una variación del viento.

Respecto a la evolución del fuego, ha sido claro, "todavía ni siquiera está estabilizado", por lo que ni el control ni la extinción se prevén a corto plazo. "No sé cuánto tiempo nos puede llevar el poderlo dar como controlado y extinguido", ha reconocido.

Las labores de extinción se desarrollan en condiciones muy duras. "El trabajo es muy duro porque el relieve es bastante abrupto", ha dicho. En zonas como la lengua de Mombeltrán, "uno de los grandes problemas son las vaguadas, que la gente no puede entrar fácilmente", lo que obliga a dar rodeos para acceder a los focos.

Operativo

En el terreno trabajan entre 400 y 500 personas, con medios que "son más o menos estables" gracias a un sistema de relevos. Por la noche los medios aéreos se retirarán al ocaso, pero permanecerá un dispositivo similar al de la jornada anterior.

Aunque no se contempla por el momento evacuar viviendas, la vigilancia es constante. "Posibilidad clara evidentemente no, porque estamos trabajando en ello", ha dicho al ser preguntado por si el fuego podría alcanzar zonas habitadas.

Sobre las previsiones meteorológicas, se espera un nuevo cambio de viento alrededor de las nueve de la noche y otro posible a la una de la madrugada, lo que complica aún más el trabajo del operativo, "te puede venir un cambio de dirección de viento o una racha y te puede destrozar todo el trabajo que llevamos estos dos días".

Por ahora, la causa del incendio sigue bajo investigación y no se han dado más detalles.