La Fundación Franz Weber ha denunciado la participación de un niño de entre 12 y 13 años, conocido como 'Librillo', en un tentadero taurino previsto para el próximo martes 15 de julio en el municipio abulense de Las Navas del Marqués. La organización naturalista considera que "este tipo de actividades vulneran los derechos del menor y suponen una exposición temprana a situaciones de violencia" sobre animales.

Según señala la fundación, el evento cuenta con el respaldo del Ayuntamiento de Las Navas del Marqués, que colabora en varias convocatorias de carácter taurino, incluida esta en la que participa el menor. A diferencia de las clases prácticas impartidas en escuelas taurinas -donde la edad mínima de participación es de 14 años- los tentaderos no están sujetos al mismo control, lo que permite la implicación de niños más pequeños sin supervisión adecuada.

La Fundación Franz Weber advierte de los riesgos físicos y psicológicos a los que se enfrentan los menores en este tipo de eventos, como heridas, cogidas o lesiones de gravedad, así como la normalización de la violencia hacia los animales como forma de espectáculo.

En este contexto, la organización recuerda que en 2018 el Comité de los Derechos del Niño de la ONU instó a España a prohibir la participación de menores de 18 años tanto como toreros como espectadores en espectáculos taurinos, con el objetivo de evitar los efectos nocivos de estas prácticas. Esta recomendación se reforzó en 2023, cuando el mismo Comité publicó el ‘Comentario General nº26’, en el que se aboga por proteger a la infancia de cualquier forma de violencia, incluida la ejercida contra animales.

Pese a estas advertencias, la Fundación denuncia que "ni el Gobierno central ni la Junta de Castilla y León han tomado medidas legislativas para restringir la participación de menores en actividades taurinas". 

Desde la Fundación Franz Weber exigen que las autoridades competentes actúen de inmediato y cumplan con los compromisos internacionales en materia de protección de la infancia, evitando que los menores sigan siendo expuestos y partícipes en espectáculos de violencia animal.