Con la comedia El Florido Pensil (niñas), a cargo de la Compañía Lagasca de El Barco de Ávila
El XVIII Certamen Lagasca de Teatro levanta el telón
Con la comedia El Florido Pensil (niñas), a cargo de la Compañía Lagasca de El Barco de Ávila
El Barco de Ávila tiene cada año una cita especial con el teatro durante los meses de mayo y junio. Un encuentro esperado con impaciencia por todos los aficionados al arte de Talía de la comarca barcense. Todos ellos estaban llamados a presenciar la inauguración del XVIII Certamen Lagasca de Teatro que tenía lugar la tarde de este primer sábado del mes de mayo.
Comenzó el acto de apertura con unas palabras de bienvenida de la alcaldesa de la Villa barcense, Pilar Araoz, recordando que este año es la XVIII edición del Certamen. Una mayoría de edad que da fe de la salud de este evento. La alcaldesa ha querido resaltar que esta larga andadura ha sido posible, además de por la apuesta decidida del Ayuntamiento por que siga adelante, por la ayuda económica de la Diputación de Ávila y por la colaboración de las diversas casas comerciales de la Villa, además del apoyo incondicional del público. Ha querido dar las gracias a todos estos estamentos, a la Compañía de Teatro Lagasca y a la organización del Certamen, que hacen posible año tras año este acontecimiento.
Seguidamente tomó la palabra el director del Certamen, José Antonio Jiménez, que señaló que se habían presentado al mismo 123 grupos de teatro de toda España, lo que denota el interés que suscita en el mundo del teatro aficionado este exitoso Concurso, que hace que el nombre de El Barco de Ávila sea muy conocido, y no solo por sus famosas judías.
Presentó a continuación la obra que iba a representar la Compañía Lagasca, de la que también es director. El grupo de teatro local es el encargado de abrir el Certamen y cada año el público espera con impaciencia su inicio para asistir al estreno de una obra que se presenta fuera de concurso y que atrae a decenas de aficionados que no quieren perderse la ocasión de ver sobres las tablas del escenario a su grupo de teatro, que saben que nunca defrauda. Así ha sido en esta ocasión, en la que presentaban la comedia El Florido Pensil (niñas), basada en una novela de Enrique Sopeña, hábilmente adaptada por el mismo José Antonio Jiménez para las características de la Compañía Lagasca. Como es habitual en el día del estreno, el teatro se ha quedado pequeño para acoger a todos los aficionados que querían presenciar el espectáculo.
Largo aplauso
Al finalizar la comedia, un público entregado, que ha disfrutado y reído muchísimo con esta conseguida puesta en escena, ha tributado un largo aplauso a un grupo de teatro, que cada año se supera y que en esta obra cuenta con el gran trabajo que realizan Felisa Martín, Josefina Sánchez, Isabel Luna y Julia García dando vida a los personajes que podrían haber sido ellas mismas de niñas, alumnas de una escuela cualquiera de la España de la posguerra, con sus cánticos patrióticos o la educación dada al estamento femenino, que solo contemplaba la posibilidad de que al llegar a la edad adulta, estas muchachas fueran sumisas esposas y sacrificadas madres. Los maestros están magníficamente protagonizados por Raúl Zapatero, que da vida a D. Secundino, al inspector y a D. Salvador, y por José Luis Gutiérrez, que se mete en la piel de D. Justo, Doña Jacinta y D. Simón, personajes todos ellos producto de aquel ya lejano tiempo en el que se desarrolla la acción.
El próximo sábado, día 10 de mayo, comienza la fase de concurso, con la llegada a El Barco de Ávila de Corocotta teatro, de Reinosa, Cantabria, primero de los seis grupos que optarán a los premios en liza y que pondrá en escena la comedia Gente estúpida, de Daniela Fejerman.