El Club Deportivo Colegios Diocesanos cerrará 2025 con un exigente desplazamiento a Miranda para medirse al Mirandés B, un rival al que su entrenador, Iván Lastras, define como "un equipo muy difícil" y con futbolistas que ya han debutado en Segunda División.

El técnico abulense subraya el buen rendimiento lejos de casa, donde el equipo se siente "muy cómodo" y se está mostrando "muy sólido". Pese al respeto al rival, confía en las opciones de los suyos si mantienen su identidad, "si nosotros hacemos las cosas como debemos, vamos a tener nuestras posibilidades".

El choque llega tras la victoria a domicilio ante Unionistas B, que ha colocado a los diocesanos en la séptima posición. Aunque Lastras resta importancia a la clasificación, reconoce la tranquilidad que aporta, el equipo llegará al final de año "alejado de los puestos de descenso".

El viaje, largo e incómodo, no será excusa. El entrenador recuerda que son "un equipo muy humilde" y que están "acostumbrados a este tipo de desplazamientos", por lo que afrontarán el trayecto en el día con la misma mentalidad competitiva.

Tras el partido, el cuerpo técnico dará prioridad al descanso físico y mental. "Tenemos que descansar", admite Lastras, consciente de una temporada marcada por las lesiones y la carga de partidos, antes de regresar el 4 de enero en casa ante el Villaralbo.

En el apartado médico, el técnico ha confirmado la baja definitiva de Iker Segovia por acuerdo mutuo. Además, Hugo no viajará por precaución tras recibir el alta y Jorge seguirá con tratamiento conservador por su pubalgia, mientras que el resto de la plantilla podría estar disponible para la cita en Miranda.