La Diputación de Ávila ha cerrado su participación en INTUR 2025 con un balance muy favorable y la convicción de que la provincia consolida su presencia en uno de los escaparates más relevantes del turismo de interior. Según el diputado de Turismo, Armando García Cuenca, la institución vuelve con "la satisfacción de comprobar el crecimiento del interés por la oferta turística de nuestra provincia, que aumenta a la par que la feria gana relevancia, como demuestran los datos que nos ha ofrecido la organización al cierre de esta 28ª edición".

Entre el 13 y el 16 de noviembre, el estand provincial puso el foco en la cultura tradicional rural. García Cuenca destaca que en esta ocasión se ha apostado por "poner de relieve la cultura tradicional rural de los municipios que conforman nuestro territorio a través de un espacio abierto que ha mostrado la autenticidad, la identidad y la hospitalidad del medio rural".

La estrategia promocional giró en torno a actividades complementarias al turismo rural, especialmente aquellas ligadas a la gastronomía, el enoturismo, la naturaleza, la sostenibilidad y el patrimonio material e inmaterial, elementos que el diputado define como "eje cultural de la oferta turística de la provincia".

El estand, de 150 m², se dividió en dos áreas principales. Una de ellas albergó un planetario portátil de 36 m², concebido para dar visibilidad al astroturismo, una propuesta llamada a destacar el próximo verano gracias al eclipse solar total del 12 de agosto, donde se han realizado mil proyecciones. El segundo espacio, más abierto, estuvo dedicado a la enogastronomía abulense, con presentaciones y degustaciones que atrajeron a numerosos visitantes. Allí se ubicó también el punto de información, que recibió "más de cuatro mil consultas de personas interesadas en la oferta de la provincia", especialmente quienes buscan alojamientos rurales de calidad, experiencias de naturaleza y turismo activo. Este año destacó el interés en propuestas de turismo familiar para verano, una tendencia que, según García Cuenca, confirma que "el turismo de interior se va consolidando como alternativa sólida frente a otros tipos de turismo más maduros, como el de sol y playa".

A lo largo de los tres días de feria, el espacio provincial acogió presentaciones de diferentes zonas de Ávila —Alberche-Pinares, El Barco-Piedrahíta-Gredos, La Moraña— que reunieron a un numeroso público atraído por la combinación de cultura y naturaleza.

La Diputación también ofreció su estand como plataforma a iniciativas turísticas de diversa índole: la campaña navideña de Arenas de San Pedro, la Ruta de los Belenes con 33 municipios, el proyecto de turismo de la Fundación Kerbest en El Oso o la próxima edición de Ornitocyl, entre otras propuestas con gran proyección.

Un papel destacado lo tuvieron las presentaciones enogastronómicas, que llenaron el espacio con degustaciones promovidas por ayuntamientos y entidades locales, como el Ayuntamiento de Gotarrendura, los vinos de Madrigal de las Altas Torres y la DOP Cebreros, además de platos representativos como las judías de El Barco o un guiso de setas con jamón.

El compromiso de la Diputación con el tejido asociativo y empresarial se reflejó en los talleres dirigidos a familias e infancia, impartidos por profesionales del sector. Estas actividades acercaron a los más pequeños a las tradiciones celtas y vetonas, los belenes con elementos naturales, los instrumentos artesanales o los calendarios lunares, despertando interés por la astronomía y los fenómenos celestes.

En el escenario principal de la Junta de Castilla y León, Ávila tuvo una presencia central: la presentación del Plan de Acción del eclipse, la muestra de Mascarávila 2026 o la recreación del paso de Carlos I, organizada por la Asociación Cultural La Ponseca, con más de veinte figurantes. La Ronda de Serranillos puso la nota festiva en el estand con danzas tradicionales, música en directo y degustaciones.

En conjunto, el diputado concluye que la participación ha sido sobresaliente: "Por todo lo dicho, el balance de la promoción de la provincia, articulado en los tres ejes de cultura, naturaleza y gastronomía ha sido muy positivo y fructífero", permitiendo reforzar la imagen de Ávila como referente en turismo rural y experiencial.